Por Su Espejo

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Cuando llegan estos largos meses muertos

donde no hay excusas por qué hablar contigo

tengo que pensar en un abrevadero

para ver tu boca entredormido.

Busco entre mis cosas algo de obsequiarte

que te saque un rato por los pensamientos

y te deje un poco en mis campos desiertos

antes de volverte a tus lugares.

Sé que si estás lejos, quedará un recuerdo

que con los otoños teñirá de incienso

y de un amarillo de fotografía

esta montonera de hojas mías.

Antes que la noche trague el universo

y una estrella estalle en mi melancolía,

y que tus palabras se hundan en un eco

que desaparezcan la poesía

rie con tus ojos, que se han puesto llenos

de mis ojos siempre que traes los colores,

mujer de vestidos tintos y bemoles

carga con mis flores tus cabello

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